Corea del Sur pasó de ser una colonia japonesa, un lugar donde se libró entre 1950 y 1953 una cruenta guerra con la intervención de las potencias internacionales a ser hoy en día una de las economías más avanzadas del mundo.
En el 2014 en un Foro Global de Inversiones en la Ciudad de Vancouver, Canadá donde acudí como expositor de PKF para fomentar la inversión extranjera en México, tuve la oportunidad de platicar con delegados del llamado Tigre asiático y conocer de primera mano algunos datos del milagro económico surcoreano.
En solo 60 años pasaron de ser uno de los países más pobres del mundo con un PIB de apenas $1,000 USD por habitante a tener hoy un promedio de ingreso de $35,000 dólares por persona. En ese periodo pasaron de ser un país del nivel de Ghana en Africa a superar en inversión, consumo, gasto de gobierno y exportaciones a España. Nada mal para un país que es 20 veces más pequeño en extensión territorial que México y tiene menos de la mitad de nuestra población. Para ponerlo en perspectiva Corea del Sur es del tamaño de Oaxaca.
Hoy día en Corea del Sur sólo el 0.2% de la población está en situación de pobreza. El 100% de la población tiene acceso a la electricidad, el 98% de sus habitantes termina la educación secundaria y el 60% obtiene un grado académico universitario. También son uno de los países más seguros del mundo con sólo 1 homicidio intencional por cada 100 mil habitantes al año.
Ya sé que se están preguntado cómo ha logrado Corea del Sur semejante desempeño. Pues en primer lugar desde 1960 hasta 1980 optaron por una economía de mercado pero con cierta intervención del Estado sobretodo en el diseño de una meticulosa política económica e industrial, también abrieron la economía al mundo y hoy están entre los 7 principales países exportadores del orbe, el drástico incremento del ingreso per capita llevó al país a elevadas tasas de ahorro lo cual permitió acelerar la inversión. Y el secreto infalible, han destinado mucha inversión en educación, ciencia y tecnología.
¿Y México, donde queda México? Pues en el mismo periodo de 60 años mientras Corea multiplicó por 35 veces su ingreso por persona nosotros lo hicimos por 10. Fíjense en este dato, si México hubiera crecido al mismo ritmo que Corea hoy nuestra economía debería ser del tamaña de la economía alemana y estar entre las 5 más grandes del mundo.
Mientras los productos Coreanos siguen moldeando el paisaje urbano global con automóviles, maquinaria, productos electrónicos y de consumo, nuestro país sigue postergando su enorme potencial y desdeñando la increíble oportunidad que nos representa el comercio exterior, sobretodo en el marco del TMEC. Pobres coreanos, para ellos solo el crecimiento pero nosotros, nosotros tenemos a Chico Ché y la Crisis.
Cometario para el 92.7 FM del 25 de julio de 2022
Jimy Cruz.
